Washington, D.C. — La legislatura de Texas aprobó hoy una medida que dificultaría que las personas ejerzan su fundamental derecho a voto. En respuesta, William Roberts, director general de Democracia y Reforma Gubernamental del Center for American Progress, emitió la siguiente declaración:
Esta ley no tiene otro propósito que suprimir las voces de los votantes de Texas, particularmente aquellos en comunidades históricamente subrepresentadas y de color. Es parte de un esfuerzo flagrante en estados de todo el país para erigir nuevas barreras que bloquearán a los estadounidenses para que ejerzan su fundamental derecho a voto. Se aprobó además a pesar del valiente esfuerzo de los valientes legisladores estatales que organizaron una huelga para evitar que se realizara la votación y llamar a una acción federal. Ahora, le corresponde al Congreso aprobar legislación federal sobre derechos electorales -como la Ley Para el Pueblo y la Ley para el Avance de los Derechos Electorales John Lewis-, que detendría estos esfuerzos discriminatorios anti-voto y aseguraría que cada estadounidense pueda emitir su sufragio.
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