Washington, D.C. – La Cámara de Representantes de EE.UU. aprobó hoy el Plan de Rescate Estadounidense, el plan del presidente, Joe Biden, para abordar las consecuencias sanitarias y económicas de la pandemia de coronavirus. El proyecto ahora será considerado en el Senado de los Estados Unidos.
Tras la aprobación en la Cámara, Winnie Stachelberg, vicepresidenta ejecutiva de Asuntos Externos del Center for American Progress, emitió la siguiente declaración:
La aprobación hoy del Plan de Rescate Estadounidense en la Cámara de Representantes representa un tremendo paso adelante en la lucha de los Estados Unidos para combatir la pandemia de COVID-19 y mantener a las familias, los trabajadores desempleados, los gobiernos estatales y locales y las pequeñas empresas salvaguardados, hasta que hayamos contenido el virus lo suficiente.
Además de ayudar a ampliar los esfuerzos de vacunación y proveer a las familias de apoyo adicional en forma de pagos directos y acceso ampliado a la cobertura de salud, el plan también promovería el bienestar de las familias y los niños de los Estados Unidos, al entregar recursos críticos para reabrir escuelas, abordar la pérdida de aprendizaje, y mantener a flote los centros de cuidado infantil después de un año de menor inscripción y gastos de capital significativos. Asimismo, la expansión y las mejoras realizadas al crédito tributario por hijos, el Crédito Tributario por Ingreso del Trabajo y los programas de asistencia temporal para familias necesitadas, reducirían drásticamente la pobreza.
Adicionalmente, la Cámara incluyó una disposición que aumentaría el salario mínimo a $15 la hora y eliminaría el salario sub mínimo. Aumentar el salario mínimo es una forma clave de estímulo económico que ayudaría a 32 millones de estadounidenses a llegar a fin de mes, estimularía el gasto en empresas grandes y pequeñas, y ayudaría al país a recuperarse más rápidamente de la crisis del COVID-19.
Aunque tardíos, estos apoyos son fundamentales a la luz de la adversidad provocada por el año pasado, al tiempo que serían un impulso particular para todos los necesitados, incluidos los negros, indígenas y otras personas de color que han sufrido de manera desproporcionada por la pandemia y la crisis económica. Es por eso que el Plan de Rescate Estadounidense cuenta con el apoyo de líderes electos bipartidistas a nivel estatal y local, se ha ganado el apoyo de la comunidad empresarial y es abrumadoramente popular, obteniendo el respaldo de casi tres de cada cuatro estadounidenses, incluyendo la mitad de los republicanos aproximadamente. El Senado debe actuar sin demora para entregar al pueblo estadounidense la ayuda que con tanta desesperación necesita y apoya.
Para obtener más información o hablar con un experto, no dude en contactar a Ricardo Rauseo a rrauseo@americanprogress.org.