El presidente Barack Obama ganó la relección porque fue capaz de obtener el apoyo de una coalición multirracial, multiétnica y de distintas clases quienes creen en una agenda progresista para Estados Unidos. Las comunidades de color apoyaron abrumadoramente su visión para impulsar nuestro país adelante: Las encuestas muestran que el presidente Obama ganó el 75 por ciento del voto latino, más del 90 por ciento del voto afroamericano, y el 73 por ciento del voto asiático-americano, así como también el 39 por ciento de votantes blancos no hispanos.
Según varias encuestas realizadas por la NAACP, CAPCD Nacional y, LatinoDecisions, latinos, afroamericanos y asiático-americanos junto con el resto del electorado estadounidense que apoyó al presidente, citaron abrumadoramente a la economía y el empleo como su principal tema en las elecciones 2012. Mas aun, dijeron, la visión y las políticas que el presidente Obama presentó resonaron con la gran mayoría de ellos.
Su nivel de preocupación por la economía no es de extrañar, teniendo en cuenta los desafíos económicos y sociales que las comunidades de color enfrentan. Latinos y afroamericanos siguen sufriendo altas tasas de desempleo de 9,9 por ciento y de 13,4 por ciento, respectivamente. Lo que es diferente en esta elección, sin embargo, es el rostro cambiante de nuestro país que hace que sea imperativo que se proporcione soluciones para promover el bienestar económico de todos nuestros ciudadanos. El enfoque y los valores del presidente -ya sea en las inversiones para fortalecer y hacer crecer la clase media, un plan tributario justo, un sistema excepcional de educación pública, o cobertura de cuidado de salud asequible -resonaron profundamente con estas comunidades y en muchos otros estadounidenses, incluyendo los votantes blancos no hispanos.
Las elecciones de este año nos dieron un vistazo al futuro ya que las filas de los estadounidenses de diferentes razas aumentan en toda la nación, impulsados principalmente por el crecimiento en las comunidades latinas y asiático-americanas. Según el Instituto de Política Tomas Rivera, el 48 por ciento de todos los ciudadanos de Estados Unidos en la actualidad que viven en Texas y que tienen menos de 18 años son latinos; en Florida, es un 27 por ciento; y en Colorado, 30 por ciento. A nivel nacional, la comunidad asiática-americana ha visto un crecimiento de 46 por ciento entre 2000 y 2010, según la oficina del censo. Este cambio demográfico no sólo ocurre en las ciudades de entrada habituales, pero es también evidente en el corazón del pais- tendencias demográficas que continuarán independientemente de las fluctuaciones de inmigración, ya que está condicionada principalmente por nacimientos en Estados Unidos.
La participación de este electorado diverso envía un mensaje claro a todo funcionario público que tiene por objeto el ser elegido: Necesitamos una agenda de políticas para ayudar a restaurar el sueño americano de movilidad social y económica para todos y apoyar una visión progresista basada en la idea de que nuestra economía debe funcionar para todos, no sólo para unos pocos ricos.
A continuación se muestra una visión general de cómo la gente de color votaron en estados claves y los temas que los motivaron.
Virginia
El voto afro-americano y el voto latino ambos fueron decisivos para la victoria azul en Virginia, al igual que en el 2008. El presidente Obama mantuvo un fuerte apoyo de las comunidades de color en la misma forma que lo hizo en 2008. Él tomó el 93 por ciento del voto afroamericano, 65 por ciento del voto latino, 64 por ciento del voto asiático-americano, y 37 por ciento del voto blanco no hispano.
Los cambios demográficos en el estado también jugaron un papel importante. La participación electoral fue más alta en las zonas que han estado experimentando cambios demográficos, como los alrededores del norte de Virginia, Richmond y Virginia Beach. En 1970, el norte de Virginia representó el 12 por ciento de la población del estado, para el año 2010 creció más que el doble llegando a más del 30 por ciento. A medida que los suburbios de Washington se han expandido, el norte de Virginia se ha vuelto más diverso y con mejor educación. Según las encuestas de salida, los condados claves en el norte de Virginia, como Loudoun, Prince William y Fairfax apoyaron al presidente Obama por un 52 por ciento, 57 por ciento, y 59 por ciento, respectivamente. Casi el 40 por ciento del condado de Loudoun, el 55 por ciento del condado de Prince William, y el 47,7 por ciento del condado de Fairfax son personas de color.
Aunque muchos creen que el voto blanco no hispano no era importante para la victoria de Obama en Virginia, lo contrario es cierto. Los blancos apoyaron al presidente a un ritmo mayor de lo que apoyaron al senador John Kerry (D-MA) en 2004-32 por ciento contra a 37 por ciento en Virginia. Esto demuestra que el mensaje del presidente Obama también resuena con los votantes blancos, especialmente con los del norte de Virginia, quienes tienden ser más educados que el resto del estado. Virginia del Norte ha crecido en un 24 por ciento en la última década, impulsada por el aumento rápido en las personas de color y los graduados universitarios blancos, y la región constituye un tercio de los votos totales de Virginia.
Los votantes latinos de Virginia figuraron la economía, el empleo, y la inmigración como sus prioridades– a un 55 por ciento y 42 por ciento, respectivamente. Según Latino Decisions, el 53 por ciento de los latinos de Virginia están de acuerdo en que “el presidente Obama se preocupa por la comunidad latina”, comparado al 18 por ciento que cree que el candidato presidencial republicano y ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney se siente de la misma manera.
El voto afro-americano fue igualmente un bloque electoral clave para que el presidente Obama ganara Virginia. Según las encuestas de salida, los afroamericanos representaron el 21 por ciento de los que votaron en el estado la semana pasada, y el 94 por ciento apoyaron al presidente. Este grupo surgió en mayor número que en 2008, cuando el voto afro-americano compuso el 20 por ciento de los electores de Virginia y apoyaron al presidente Obama por un 92 por ciento.
La población asiática-americana de Virginia fue también esencial en la relección del presidente Obama. La población asiática-americana de Virginia incrementó drásticamente durante la última década, creciendo un 68 por ciento en los últimos tres años-este crecimiento esta concentrado en el norte de Virginia, donde números grandes se registraron para elegir a el presidente Obama. En 2000, los asiáticos e isleños del Pacífico formaron 6,6 por ciento de la población de los condados de Virginia cerca de Washington, DC; una década más tarde, ese número se ha duplicado a 13,6 por ciento.
Al fin de cabo, el hecho de que el presidente Obama tuvo el apoyo de las comunidades de color y los votantes blancos en Virginia es la razón por la cual el estado se convirtió en azul y por qué fue relegido el presidente.
Colorado
Colorado se convirtió en azul este año debido principalmente a la alta participación en la comunidad latina. Encuestas de Latino Decisions muestran que el 87 por ciento de los latinos votaron por el presidente Obama, un aumento respecto a 2008, cuando se llevó el 61 por ciento del voto latino. Según las encuestas de salida, los condados claves que tienen un gran número de latinos votaron abrumadoramente para el presidente Obama. El condado de Pueblo, compuesto del 41,4 por ciento de latinos, votó por el presidente a una cifra de 55 por ciento, similar a la cifra del condado de Adams, donde el 38 por ciento de la población es latina y el 56 por ciento de ellos votaron por el presidente Obama. El presidente también disfrutó de un 44 por ciento del voto blanco no hispano, un aumento de 2 puntos porcentuales en comparación con el apoyo de blancos en Colorado que votaron por el senador Kerry en 2004. Votantes afro-americanos y asiático-americanos no fueron tan cruciales en Colorado como en otros estados, ya que cada una de estas comunidades sólo compone el 3 por ciento de los electores de Colorado.
En 2010, la población latina en Colorado llegó a 1 millón- representando uno de cada cinco residentes de Colorado. El voto latino constituyó todo el aumento de la participación minoritaria de los votantes elegibles en el estado durante los últimos cuatro años. La Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Designados proyectó que el estado tendría unos 224.000 votantes latinos en las elecciones de este año, un aumento del 15 por ciento desde 2008. Los latinos actualmente constituyen un 12,4 por ciento del electorado del estado y el 87 por ciento votó por el presidente Obama.
El apoyo de los latinos para el presidente en las elecciones de este año no fue una sorpresa ya que la economía y el empleo y la inmigración fueron también los principales problemas para el electorado latino en Colorado, y 7 de cada 10 latinos creyeron que el presidente Obama tuvo un mejor plan para mejorar la economía que el gobernador Romney. Este fuerte apoyo ayudó a llevar al presidente a la victoria en este estado clave.
Florida
La victoria del presidente Obama en Florida estaba directamente relacionada con la movilización de la gente de color, especialmente el crecimiento rápido de la población latina. Mantuvo una fuerte influencia en el voto afroamericano- 95 por ciento-y se vio un aumento en el voto latino de 57 por ciento en 2008 a 60 por ciento en 2012, con un incremento del 2 por ciento en la participación de los votantes. La comunidad latina apoyó al presidente Obama en todos los ámbitos en términos de origen nacional, con el mayor apoyo por parte de la República Dominicana, Centroamérica y las comunidades puertorriqueñas. El presidente también llevó el 37 por ciento del voto blanco no hispano en Florida.
Aproximadamente el 34 por ciento de los votantes de la Florida son personas de color, y los latinos representan el 17,4 por ciento del electorado del estado, mientras que afroamericanos representan el 13,7 por ciento. Los latinos contribuyeron a la victoria de Obama por 3,1 puntos porcentuales. El crecimiento de este electorado se vio impulsado por el aumento de hispanos no cubanos-que tienden a votar por los demócratas- en el estado.
El número de registro de votantes entre los latinos también se incrementó por más de 300.000 desde noviembre de 2008, con sólo 31.000 registrados como republicanos. Esto significa que el 90 por ciento de los latinos que se han registrado para votar desde el año 2008 lo hicieron como demócratas e independientes. Colectivamente, los votantes registrados entre los afroamericanos, caribe-americanos, e hispanos aumentaron por más de 450.000 desde 2008, que es un poco menos del doble de los 236.450 votos que el presidente Obama ganó en Florida en el 2008.
Según las encuestas de salida, los condados principales del sur de Florida como Miami-Dade, Broward y Palm Beach, apoyaron al presidente Obama por un 62 por ciento, 67 por ciento, y 58 por ciento, respectivamente. Estos condados tienen grandes comunidades con poblaciones de color. El condado de Miami-Dade esta compuesto por aproximadamente el19 por ciento de afroamericano y 64,5 por ciento latino. El condado de Broward es27,4 por ciento afroamericano y 25,8 por ciento latino y Palm Beach es 17,8 por ciento afroamericano y 19,6 por ciento latino.
Los votantes latinos en la Florida figuran la economía y la inmigración como los dos problemas más importantes que enfrenta su comunidad, a un 57 por ciento y 37 por ciento, respectivamente. No es de extrañar, entonces, que dieron su apoyo a Obama dado una reciente encuesta realizada por Latino Decisions que muestra que los latinos creen que el Presidente Obama gobernaría mejor que el gobernador Romney con respecto a la economía y la inmigración. El amplio apoyo de la comunidad latina, en particular, ayudó a convertir Florida en un azul este año, lo que sumó a su re-elección.
Ohio
La victoria del presidente Obama en Ohio dependió en gran medida del voto afroamericano, quienes salieron a votar en números más altos que en 2008. Con base en datos de encuestas de salida, el presidente Obama asumió el 96 por ciento del voto afro-americano este año y tuvo un 97 por ciento en 2008. La población afro-americana también tuvo una mayor proporción de votantes este año que en 2008-su porcentaje del total número de los votantes de Ohio aumentó de un 11 por ciento en 2008 a un 15 por ciento este año.
La demografía en Ohio hizo que fuera un estado más difícil para el presidente de ganar porque el 84 por ciento de la población del estado es anglosajón, y en general apoyaron el gobernador Romney por un57 por ciento. El gobernador Romney ganó el voto blanco (hombres y mujeres anglosajones) en números mayores que el senador John McCain (R-AZ) en el 2008. Los hombres anglosajones votaron por el gobernador Romney por un 63 por ciento contra el 36 por ciento quienes votaron para el presidente Obama-el senador McCain obtuvo el 53 por ciento contra el 45 por ciento en 2008-y las mujeres anglosajonas votaron por el gobernador Romney por un 53 por ciento contra el 46 por ciento para el presidente Obama, sobre el mismo margen de hace cuatro años. El voto anglosajón en Ohio por lo general, sin embargo, fue de un 79 por ciento- aproximadamente 4 puntos menos que en 2008. Cuarenta y un por ciento de los anglosajones no hispanos residentes de Ohio le dieron su apoyo al presidente Obama.
También hay una población latina relativamente pequeña de en Ohio, de un 3 por ciento en comparación con el promedio nacional de 17 por ciento. Aun así, la mayoría de ellos-54 por ciento-votaron por el presidente Obama.
Los afroamericanos constituyen el 12,4 por ciento de la población de Ohio, y fue por lo tanto este grupo de votantes que constituyeron el margen necesario para que el presidente Obama llegara a la victoria. La participación electoral más alta en la comunidad afroamericana estaba directamente relacionada con las crecientes tasas de registro de votantes y la votación temprana en la comunidad afroamericana. La inscripción de votantes en esta comunidad subió por un 20 por ciento en 2012, y la votación temprana subió por un 17 por ciento desde 2008 entre los afroamericanos en Ohio. A nivel nacional, en base a los datos pre-electorales, la comunidad afroamericana tuvo mayores niveles de entusiasmo por votar en esta elección-casi el 20 por ciento más alto que otros votantes.
Además, entre los votantes registrados, los afroamericanos eran más propensos a votar: El 85 por ciento dijo que “definitivamente votaban” este año. Este entusiasmo entre los afroamericanos, tanto en Ohio y en todo los Estados Unidos, fue una gran parte de por qué el presidente Obama se dirige de nuevo a la Casa Blanca para un segundo mandato.
Nevada
El voto latino y asiático-americano en Nevada fueron fundamentales para la victoria del presidente Obama en el estado, quienes lo apoyaron por un 71 por ciento y 50 por ciento, respectivamente. El también mantuvo una fuerte influencia en el voto afroamericano por un 92 por ciento, aunque la participación de los votantes en este grupo disminuyó ligeramente, por 1 por ciento, desde 2008. Los anglosajones no hispanos también apoyaron al presidente por un 43 por ciento-los mismos puntos porcentuales que los votantes anglosajones de Nevada le dieron al senador Kerry en 2004.
Las comunidades latinas y asiático-americanas en el estado han crecido de manera exponencial en la última década. Según la Oficina del Censo, las comunidades latinas y asiáticas del estado representan el 27 por ciento y 7,7 por ciento, respectivamente, de la población del estado y han crecido a un ritmo de un 82 por ciento y un 116 por ciento, respectivamente, entre 2000 y 2010. La comunidad asiática-americana vio un aumento del 2 por ciento en la proporción de votantes desde el 2008, y las personas de color representan casi el 40 por ciento de los votantes elegibles de Nevada.
Según las encuestas de salida, los dos condados claves para asegurar la victoria del presidente en Nevada eran los condados de Clark y Washoe, que votaron por el presidente Obama por un 56 por ciento y 51 por ciento, respectivamente. La comunidad latina representa el 29,7 por ciento del condado de Clark y el 22 por ciento del condado de Washoe, que se localizan en el sureste y noroeste del estado. Las encuestas indican que los latinos votaron por el presidente Obama por un margen de casi 2-a-1 en el estado. Además, de acuerdo con las encuestas de salida, el presidente Obama llego a tener el 50 por ciento del voto asiático-americano, un aumento de 3 puntos porcentuales con respecto al 2008.
Las encuestas también mostraron que cuando se trata de los problemas, las comunidades de color en Nevada creen que el presidente Obama va a resolver los problemas más difíciles de su estado. Los latinos en Nevada citaron la economía y la inmigración como los dos problemas más importantes que afectan a sus comunidades por un 54 por ciento y 40 por ciento, respectivamente. Cuando se trata de la cuestión de la inmigración, 61 por ciento de los latinos en Nevada se sentían con mas entusiasmo sobre el programa del presidente Obama de la acción diferida para jóvenes quiénes llegaron en su infancia, y menos entusiastas sobre la postura de la auto-deportación del gobernador Romney, lo cual sólo fue apoyado por el 5 por ciento de los votantes latinos.
La visión para Estados Unidos del presidente Obama resonó con más votantes de Nevada que la visión del gobernador Romney, por lo que el estado se convirtió en azul en el 2012.
Conclusión
Los votantes multirraciales y multiétnicas en estados claves y en toda América hicieron oír sus voces el 6 de noviembre y lo harán de nuevo en las próximas décadas. La gente de color salió en números históricos este año para re-elegir al Presidente Obama, no sólo por su simpatía, sino también por las políticas que ha presentado y el impacto que la administración de Obama ha tenido en sus comunidades. Es evidente que la economía y la inmigración fueron las áreas claves de emisión para estas comunidades, y grandes márgenes de estas poblaciones pusieron a favor la visión progresista de América planteada por el presidente Obama sobre las ideas del gobernador Romney.
Esta elección ha sido una llamada de atención para los conservadores. La mayoría de los estadounidenses están de acuerdo con la visión progresista-que necesitamos construir una nación que le beneficie a todos los estadounidenses, no sólo a unos pocos elegidos.
Vanessa Cárdenas es la directora de Progress 2050 en el Center for American Progress. Sophia Kerby es un asistente especial para Progress 2050.